La generosidad genera abundancia

La frase que le da nombre a esta entrada del blog, la escuché de una persona a quien admiro mucho, se le adjudica al Dalai Lama y durante las últimas semanas he tratado de entenderla más allá de lo que aparentemente representa.

A simple vista “la generosidad genera abundancia” nos dice que entre mas generosos seamos más abundancia tendremos. Por ejemplo, entre más donativos demos a una causa, seguramente más dinero caerá en nuestros bolsillos. Pero en realidad, creo que funciona de una manera más profunda.

Quiero empezar con la idea de que el mundo es un lugar de equilibrio. Todo se encuentra ordenado de tal manera que el animal grande se come al chico y ese animal chico se ha alimentado antes con alguna planta o algún animal más pequeño… y así todos los organismos que habitan la Tierra se complementan unos a otros y forman parte de un sistema único. 

Me gusta pensar que este equilibrio es cien por ciento aplicable a los seres humanos. Me lo imagino como una balanza y la belleza radica en que si yo comparto algo de lo mío, la persona que lo recibe estará en posibilidad de compartir algo de lo suyo, y a su vez, la próxima persona compartirá algo más al ser humano frente a ella. Y todos, al soltar algo que es de nuestra propiedad rompemos un poquito de ese equilibrio y la naturaleza se encargará en enviarnos algo a fin de crear nuevamente ese balance. 

¿Lo pude explicar de manera clara? Espero que si. 

Cuando se hace referencia a la generosidad, considero que hace referencia al hecho de dar y compartir sin esperar nada a cambio y que, por supuesto, se realiza de una forma genuina, desde el corazón. Si le preguntas a una persona si es o no generosa, quizá dude al momento de responder y lo más seguro es que no tenga una respuesta, ya que lo que hace le nace del corazón y le resulta normal dar y compartir. 

Y son justamente esas personas las que “aparentemente” (recalco esta palabra porque no hay vidas perfectas) llevan una vida muy chingona y como si nada malo pasara son aquellas que comparten más de su ser hacia los demás. Pero ¿qué es lo que dan y comparten?

Muchas veces viene el dinero a la mente pero en realidad se trata de aquello que para nosotros tiene un gran significado o un gran valor. Hay personas que valoran talentos muy específicos como el conocimiento técnico sobre algún tema o alguna habilidad especial como cocinar mientras que otros valoran más el tiempo, las palabras o el consejo y compañía de las personas. Con esto quiero decir, que la generosidad se consuma cuando damos de nosotros mismos lo mejor que tenemos o que valoramos en demasía y, reafirmo, de manera auténtica. 

En conclusión, si creo que la generosidad genera abundancia porque cuando compartimos genuinamente aquello que queremos y valoramos, la persona con la que compartimos entiende, acepta y se dispone a compartir algo propio hacia los demás y esa es la abundancia que resulta. Que todos, acorde a nuestra situación y entorno, podemos compartir lo mejor de nosotros. 

Y entonces, el universo con tal de regresar al equilibrio natural, nos entrega (sin nosotros solicitarlo y cuando menos lo esperamos) lo que más necesitamos justo en el momento correcto. 

Para finalizar, te comparto un video que me gusta ver de vez en cuando para recordar mi verdadero papel en este mundo y donde la idea del equilibrio se encuentra implícita.

La Naturaleza nos habla, en voz de Salma Hayek (Español)

Nature is speaking, en voz de Julia Roberts (Inglés)